El espíritu de lo ilimitado es un móvil esencial del régimen cultural dominante a nivel mundial y es la base del ecocidio.
 DANIEL BEROS
Profesor y Coordinador de la Red Ecuménica de Educación Teológicaen Argentina. Doctor en Teología por la Friedrich-Alexander Universität Erlangen-Nürnberg, Alemania.
En la interpretación de los símbolos y discursos publicitarios de las empresas multinacionales identificamos la idea de actualizar(se) constantemente, proponiendo una lógica de lo ilimitado: esto no es otra cosa que la codicia del extractivismo y la producción sin fin. Esta forma de gobernar tiránicamente la Tierra que es finita, se ancla en una visión que aún desde voces valederamente críticas como la encíclica Laudato si’, siguen proponiendo una “fe” antropocéntrica que no logra evidenciar la clausura o encorvadura sobre sí mismo del ser humano en este círculo destructivo, una auténtica concupiscencia de la carne. A esto se opone una visión del límite liberador que propone el Evangelio, a través del adviento de Dios manifestado en el llamado de la Cruz, del gemido de la Tierra, del reclamo de quienes son vulnerabilizados día tras días por este sistema. Este llamado invoca la justicia divina: desde la gracia y para la vida, una auténtica ecojusticia para la casa común.
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Corintios 1:18 | Encíclica Laudato si’. Cap. III.La Raíz Humana | Salmo 121:2 
¿Qué señales del límite liberador encontramos en donde se encuentra nuestra comunidad de fe?¿Qué nuevos rumbos nos invitan a tomar?