La IPU es genuinamente evangélica

AIPRAL emite una nota de solidaridad para su iglesia miembro Iglesia Presbiteriana Unida de Brasil (IPU), ante la ofensa inmotivada pronunciada por la Iglesia Presbiteriana de Brasil (IPB) que en la última reunión de su Consejo Supremo emitió un concepto injurioso sobre la IPU, diciendo que esta «no es una iglesia genuinamente evangélica». La Alianza se siente muy honrada de tener a la IPU como miembro y afirma que debe continuar en el ejercicio de su voz profética, luchando, desde la lectura y el reflejo del texto sagrado, contra todas las formas de violencia, racismo y discriminación de las minorías violentadas e irrespetadas en Brasil.

Brumadinho, MG/Brasil, 1 de agosto de 2022

NOTA DE SOLIDARIDAD CON LA IGLESIA PRESBITERIANA UNIDA DEL BRASIL

La Alianza de Iglesias Presbiterianas y Reformadas de América Latina, organización fundada en 1955, brazo regional de la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas Y que reúne a 22 iglesias presbiterianas y reformadas de América Latina, en vista de la ofensa inmotivada pronunciada por la Iglesia Presbiteriana del Brasil (IPB), que en la última reunión de su Consejo Supremo en Cuiabá, Mato Grosso/Brasil, emitió un concepto injurioso sobre la Iglesia Presbiteriana Unida de Brasil (IPU), reafirmando que esta «no es una iglesia genuinamente evangélica», la Alianza hace público la siguiente nota de solidaridad:


La IPU es una iglesia genuinamente evangélica, porque:
1. Tiene las Sagradas Escrituras como norma de doctrina y ética, según sus Principios de Fe y Constitución;
2. Reafirma su vocación ecuménica, reconociendo en otras iglesias cristianas el derecho a tener diferentes posiciones exegéticas y teológicas, por esto no se superpone a otras iglesias cristianas;
3. Desde su fundación, la IPU ha defendido la ordenación femenina a los ministerios del pastorado, presbiterado y diaconado como expresión de igualdad entre hombres y mujeres: “En esto no hay ni judío ni griego; no hay siervo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús” (Gálatas 3:28);
4. La IPU, al defender la igualdad de género con base en las Sagradas Escrituras, contribuye a combatir el sexismo y la violencia contra las mujeres, mal del cual Brasil es uno de los peores ejemplos;
5. La IPU no ofrece sus púlpitos ni su estructura eclesiástica a favor de ningún esquema político, porque esto, además de contradecir las Sagradas Escrituras, quita a la Iglesia de Cristo su voz profética y su independencia de los poderes del mundo;
6. La IPU tiene como uno de sus documentos fundacionales el Pronunciamiento Social de la Iglesia Presbiteriana del Brasil, pronunciamiento escrito por tres pastores fundadores de la IPU, que sigue siendo su guía y su base para el ejercicio de su voz profética;
7. La IPU, a lo largo de su corta existencia de 43 años, ha sido iglesia colaboradora de las iglesias reformadas en América Latina e incluso en Europa – donde mantiene una asociación misionera con la Iglesia Evangélica Presbiteriana de Portugal – contribuyendo con aportes teológicos, litúrgicos y también en combatir las diversas formas de injusticia y la vil miseria que insulta al Cielo;
8. La IPU es una iglesia relevante y necesaria para la difusión y renovación de la fe reformada en Brasil, justificando nuestra máxima: “Iglesia reformada siempre reformando”.
AIPRAL se siente muy honrada de tener a la IPU en el conjunto de iglesias miembros y afirma que debe continuar ejerciendo su voz profética, combatiendo, a través de la lectura y reflexión del texto sagrado, todas las formas de violencia y discriminación contra las mujeres, los pobres, pueblos indígenas, quilombolas y ribereños, así como todas las formas de racismo y discriminación contra las minorías violadas e irrespetadas en Brasil

Rev. Wertson Brasil de Souza
Presidente de AIPRAL

Rvda. Dora Arce-Valentín
Secretaria Ejecutiva de AIPRAL