Rebecca Mutumosi Mfutila, ministra ordenada de la Comunidad Evangélica del Kwango (Communauté Evangélique du Kwango, CEK), recibió el pasado 7 de noviembre, en la ciudad de Berna, Suiza, el Premio Sylvia Michel 2022. El Premio Sylvia Michel, coauspiciado por la Iglesia Protestante de Suiza (PCS, por sus siglas en inglés) y por la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas (CMIR), alienta y apoya a personas y a proyectos para el desarrollo de las mujeres en el liderazgo en las iglesias reformadas de todo el mundo.
Por Philip Tanis – CMIR | lea el artículo original
El otorgamiento del Premio Sylvia Michel promueve la toma de conciencia acerca de la desigual integración de los órganos de liderazgo de las iglesias en muchos lugares. Con el premio, visibilizamos a mujeres pioneras en todo el mundo, como Rebecca Mutumosi Mfutila, que estamos a su lado.
Rita Famos, presidenta de la PCS
«Es un acto de solidaridad y de compromiso con las mujeres que ocupan puestos de liderazgo y que insisten en utilizar sus capacidades en todos los niveles del ministerio dentro de la iglesia», manifestó la presidenta de la CMIR, Najla Kassab. «Rebecca se ha convertido en un modelo para muchas mujeres jóvenes. Las anima a asumir el liderazgo en la iglesia y en la sociedad».
Mfutila, la primera ministra ordenada en su iglesia en el año 2014 trabajó como pastora y también fue secretaria general, de manera voluntaria, de la Federación de Mujeres de la CEK en Kinshasa, en la República Democrática del Congo, durante 2002 a 2010; ha sido su presidenta desde el año 2010. Del año 2010 al 2015, dirigió el ministerio femenino de la asociación nacional Église du Christ au Congo (ECC, por sus siglas en francés). Desde el año 2020, Mfutila ha sido además responsable del área de mujeres en la federación nacional de las diversas iglesias protestantes de la ECC.
«Recibo el Premio Sylvia Michel como una invitación a trabajar aún más en la lucha por la promoción de la mujer. No es una tarea fácil, especialmente en el contexto de nuestros países subdesarrollados», expresó Mfutila en su discurso de aceptación. «Por esta razón, hago un llamamiento a todas las personas de buena voluntad para que nos ayuden de cualquier manera a llevar a cabo esta seria y noble misión».
«Este premio refleja la profundidad de nuestra comprensión del sacerdocio de todas las personas creyentes, el llamado de Cristo a todas las personas bautizadas, y el peregrinaje del Espíritu Santo en la vida de la iglesia en tanto imaginamos juntas y juntos cómo ser el cuerpo de Cristo en el mundo», añadió Kassab. «Lo que nos une es nuestra esperanza en el Dios de la vida. Seguiremos trabajando conjuntamente por un mañana mejor bajo la mirada de Dios».
El premio se creó en honor a Sylvia Michel, de la Iglesia Reformada de Argovia, quien fuera la primera mujer en ocupar el cargo de presidenta de una iglesia en Suiza. El premio es organizado desde hace tiempo por PanKS, una asociación de mujeres presidentas y vicepresidentas, en la actualidad y previamente, de las iglesias reformadas de Suiza.
Lini Sutter, encargada del equipo de liderazgo de PanKS, realizó una retrospectiva de los inicios en su alocución: «En 2005, cuando las diez presidentas -la mayoría de nosotras las primeras en la presidencia de nuestras iglesias- nos reunimos en el Rügel de Argovia, aún no teníamos idea hacia dónde nos llevaría esta unión. Nos interesaba el intercambio, el estímulo y el fortalecimiento mutuos. El Premio Sylvia Michel, creado con este espíritu, reconoce la competencia con la que las mujeres dirigen y lideran las iglesias».
PanKS se disolverá pronto, pero la PCS, en colaboración con la CMIR, seguirá otorgando el Premio Sylvia Michel.