Día de la Amazonia

Partiendo de Génesis 8:22, “Mientras la tierra permanezca no cesaran la sementera y la siega, el frio y el calor, el verano y el invierno y el día y la noche”, queremos animarles a ver la justicia climática y el agua, no solo como un tema o un recurso sino como el principio o la base de una relación que nos acerca al Dios de la Vida y toda la Creación de la cual somos parte.

Recordando estas palabras de la Asamblea General de nuestra Alianza en 2016, que tuvo lugar en Brasil, sumamos nuestras voces en el Día de la Amazonia que conmemora el mencionado país. El compromiso de la familia reformada latinoamericana está basado en el llamado de Dios a ser mayordomos y mayordomas de su creación. El cuidado de la naturaleza, su equilibrio, su cuidado del abuso y la mezquindad de la obra humana, cuando la codicia no permite ver lo necesario de conservar las grandes extensiones de vegetación del planeta, como la selva amazónica: pulmón de la Tierra. De cuidar su biodiversidad, de no interferir la dinámica de su clima, sus tierras, sus cauces fluviales. De respetar a las poblaciones ancestrales que viven en la región de la Amazonia, en una relación armoniosa y de protección del territorio, de lo sagrado de la vida manifestada en cada árbol, cada especie animal. «Para nosotros, guardianes de la selva, es un día de lucha», señala en un comunicado la Articulación de Pueblos Indígenas de Brasil (APIB).

 

 

La creación del Señor es hermosa, y su justicia permanece para siempre. Salmo 111:3

 

Debemos ser partícipes de la justicia a la que Dios nos convoca: la justicia ambiental. El consumismo desenfrenado de las poblaciones y el extractivismo desregulado de las compañías, sumadas a la desprotección estatal a través de la definanciación de los programas de vigilancia y respuesta en la Amazonia brasilera, han causado una aceleración en la depredación de las zonas forestadas, en la desparición de especies animales, en la reducción del monte amazónico y su función vital en el planeta, como emisora de oxígeno y purificadora de la presencia de monóxido de carbono en el ambiente.

Desde enero de 2019, los focos de incendio surgidos en la Amazonia brasilera aumentaron más del 50% en relación al año 2018. El viernes se reunirán autoridades de Perú, Ecuador, Colombia, Brasil, Bolivia y Surinam en la ciudad colombiana de Leticia, para buscar ponerle freno a esta situación que amenaza a la humanidad entera. La familia reformada latinoamericana acompaña los esfuerzos e insta a las autoridades de todos los países involucrados, particularmente al gobierno brasilero, a disponer los medios necesarios para atender la situación con la urgencia que requiere, así como restablecer y potenciar mecanismos para atacar la deforestación ilegal y abusiva, y restituir la autoridad y la vigilancia a las poblaciones indígenas de sus territorios protegidos a lo largo y ancho de Brasil.