Sí, es posible un mundo sin violencias contra las Mujeres

En el marco de una nueva conmemoración del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer compartimos la declaración del departamento de Mujeres de AIPRAL, denunciando el aumento cotidiano de femicidios, explotaciones y violencias de toda índole, que son amparadas por los fundamentalismos religiosos al negar el derecho a las mujeres a ser personas con dignidad creadas a imagen de Dios.

Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

Desde el Departamento de Mujeres AIPRAL seguimos unidas a las movilizaciones de las diversas luchas que son emprendidas desde diversos espacios, para generar y mantener la esperanza en que SÍ, es posible un mundo sin violencias contra las Mujeres.
Continuamos denunciando que cada día aumentan los feminicidios, los abusos, las violaciones, las explotaciones y diferentes formas de violencias tificadas o sin tipificar, que son promovidas y apoyadas por fundamentalismos religiosos que niegan el derecho a las mujeres, a ser personas con dignidad creadas a la imagen de Dios.
Con espíritu sororal y con gran sentimiento de indignación, hacemos memoria y destacamos el sufrimiento de las mujeres migrantes de todas las edades, en quienes con saña se han incrementado las diversas expresiones de violencias.
Hacemos un llamado a todas nuestras comunidades eclesiales para que, desde todas sus instancias, denuncien las diversas formas de violencias hacia las mujeres y trabajen para que sea eliminado todo vestigio de violencias las cuales, no tienen cabida en el proyecto de Dios de construir un cielo nuevo y de una tierra nueva. Que cada uno de sus espacios, sea un refugio que brinde seguridad y bienestar de las Mujeres que constituyen la mayor población de sus feligresías. Que cada una de nuestras comunidades, en medio de tantas diversas expresiones de violencias, sea el medio a través del cual podamos sentir la mano tierna de Jesús y escuchar su voz amorosa decirnos:

“Niña, a ti te digo: ¡Levántate!”

Marcos 5:41

 

¡Levantemos y andemos!


Que resuciten las Mariposas y que con su suave y tierno batir de alas, traigan frescura para mitigar las fatigas cotidianas y para animar los esfuerzos que se realizan, a fin de lograr que las Mujeres tengamos vida plena. Que en su vuelo transporten el polen de la alegría, de la esperanza, de la liberación y de la paz.

Rvda. María de la Concepción Jiménez

Directora del Departamento de Mujeres